Profesión Perpetua de Elisa Salgado y Mª Eugenia Gutiérrez

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El día 8 de diciembre, tuvo lugar la Fiesta de la Inmaculada y con ella la gran Celebración de la Profesión Perpetua de Elisa Salgado Fernández y Mª Eugenia Gutiérrez Marín. Tuvo lugar en la Casa del Sagrado Corazón de Granada. La Eucaristía estuvo presidida por Silvio Bueno SSCC, y concelebraron 8 sacerdotes más, todos muy cercanos y amigos de la Casa y de La Institución.

Fue una Celebración sencilla y solemne al mismo tiempo. Elisa y Mª Eugenia abrían la procesión con la que daba comienzo la Eucaristía, seguidas de la H. Concepción Fernández, Superiora General de la Institución, y de todos los sacerdotes que concelebraron, acompañados de un canto de alabanza.img_2565

Al terminar el Evangelio, la H. Concepción, llamó a cada una de las que iban a profesar por su nombre, y, ellas, poniéndose en pie, contestaron con un «aquí estoy». Así daba comienzo la llamada y petición de la Profesión Perpetua. Tras la homilía, comenzaba propiamente el rito de la Profesión Perpetua, en el que se invocaron a los Santos, mediante el canto de las letanías, para que intercedieran por Elisa y Mª Eugenia. En un clima de oración, Iñaki, misionero claretiano, cantaba unas sencillas letanías mientras Elisa y Mª Eugenia permanecían de rodillas. img_2558Fue un momento lleno de recogimiento que emocionó a muchos. Y por fin, Elisa y Mª Eugenia pronunciaron sus Votos Perpetuos ante la H. Conchi, cada una individualmente; firmaron sobre el altar su alianza con Dios para siempre y colocándose de rodillas, mirando al altar, fueron definitivamente consagradas a Dios, en cuerpo y alma. Después de la oración de Consagración que recitó el sacerdote sobre ellas, se dirigieron a la H. Conchi, que en nombre de toda la Institución las recibía para siempre con un abrazo de acogida. Fue un momento de mucha emoción y de alabanza a Dios. Seguido, la H. Almike renovaba sus Votos Temporales ante H. Conchi y muy emocionada por todo lo que allí se estaba viviendo.img_2563

La paz, también fue un momento muy emotivo para Elisa y Mª Eugenia y para todos los allí presentes. Lágrimas de cariño, agradecimiento, de algo que se lleva muy dentro y no se puede explicar con palabras de este mundo. Abrazos de familiares y de las hermanas de la Institución.

p1060184Tras la Comunión, la H. Mª Eugenia, en nombre de Elisa y ella, hizo una sencilla acción de gracias, intentando transmitir lo que las dos llevaban dentro, y lo que previamente habían acordado en común. Les parecía un sueño haber podido hacer sus tan deseados Votos Perpetuos. Agradecieron a Dios por ser el verdadero protagonista, por haberlas llamado, siendo ellas tan débiles y frágiles; El regalo de haber podido profesar juntas, ya que las dos habían sido connovicias y ahora la vida las había vuelto a reunir en un día tan grande para ellas, para dar el paso definitivo, en la Casa de Granada, que les vio dar sus primeros pasos, entrar con ilusión en la Vida Religiosa, la vio caerse, llorar, reir, levantarse, crecer…p1060165; A la H. Conchi, que, hoy, recibía, sus Votos Perpetuos, pero que hace años fue la Maestra de Novicia de las dos, fue testigo de sus ilusiones, de sus caídas, de sus llantos, de sus progresos, les transmitió el carisma de la Institución y el cariño a la Madre Rosario…; a todas las hermanas de la Institución, a las ausentes, que habían quedado en las Casas para cuidar a los enfermos, y a las presentes, que acudieron de todas las casas, prácticamente, representando a todas y haciendo que Elisa Y Mª Eugenia se sintieran muy arropadas y acogidas por sus hermanas, para siempre. A sus familias, la de Elisa con sus hermanos y sobrinos, y sus padres, que estaban radiantes en el cielo, gozando y orgullosos de ella. Los padres de Mª Eugenia, que sí que estaban allí presentes, y su hermana, que le transmitieron la fe y a quienes debía parte de sus vocación…
p1060252A D. Javier y Silvio SSCC, que han acompañado a Elisa Y Mª Eugenia, respectivamente, a lo largo de todos estos años, a los SSCC con los que tanto había compartido Mª Eugenia en campos de trabajo, convivencias, voluntariado…a todos los amigos y voluntarios llegados desde muy lejos, incluso desde Bilbao, y de todos los sitios en donde la Institución está presente, a todos por haberlas acompañado en el día más grande de sus vidas, en el que Elisa y Mª Eugenia, decían SÍ a Dios para siempre, en esta vida y para toda la eternidad.

La Celebración terminó cantando a María. De la mano de María, desean Elisa y Mª Eugenia llegar a los brazos del Padre.