Ilusión y magia, la fórmula contra la tristeza. Magia en Regina Mundi

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Eran aproximadamente las 17,30 del pasado viernes 8 de Marzo, cuando se abrió la puerta de Regina Mundi y entró un suave viento fresco, agradable y sobre todo alegre en forma de ligera brisa que nos acarició a todos los que allí estábamos, cambiando nuestra expresión del rostro por otra más animosa, optimista y sonriente.

Había entrado nuestro amigo Fernando Moreno, «El Mago», dispuesto, como siempre, a darnos un rato de alegría y diversión con sus variadísimos números de magia, realizados con una maestría exquisita y un derroche sin límites de simpatía y buen humor.

Disfrutamos con sus habilidades viendo su amplio repertorio artístico, con un sin fin de juegos y trucos con pañuelos, bolas, aros, globos, etc. También vimos carteras que al abrirlas para sacar el dinero salían ardiendo, y todos gritaban entre risas «Que se q

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uema el dinero», «No está la cosa para eso». Igualmente sorprendente nos pareció ver atravesar globos llenos de aire con agujas de hacer punto sin que estos explotaran.

Comprendimos entonces que ese vientecillo que antes habíamos sentido, no era otra cosa sino el genio invisible de la magia y la ilusi

Siempre nos gusta sacar de todos los actos de Regina Mundi, una enseñanza o moraleja que nos pueda marcar una directriz positiva en nuestra vida. En esta ocasión tomamos la ilusión y la magia como artífices de nuestro pensamiento.
Como siempre el más feliz de todos fue el pequeño Miguel Ángel, que no paró de reír y aplaudir en todo el tiempo. Sin duda se lo paso «pipa», pero la verdad es que todos nos divertimos y reímos en abundancia.ón que revoloteaba e inundaba todo el salón.

Hay que ser optimistas y vivir con gran esperanza convencidos de que los diferentes problemas, que todos seguro que tenemos, pueden resolverse o al menos mejorar, si ponemos una alta dosis de ilusión. Siendo así llegará el momento mágico en que todo cambié a mejor, aunque solo sea en un pequeño porcentaje, pero la magia lo agrandará para que nos parezca mayor y `podamos sentirnos más alegres y felices en nuestra vida.

Gracias Fernando, amigo mago, como dicen en la tele, te decimos todos de corazón «Tu sí que vales»