EXCURSIÓN A EL ROCÍO – 24 DE MARZO DE 2012
Quiero hacer una breve crónica de un día feliz para compartirla con todos los que leáis nuestra página web, buceando en la Institución Benéfica del Sagrado Corazón. Os hablo desde Sevilla, en Regina Mundi (San Juan de Aznalfarache). Hace dos años hicimos esta excursión organizada por algunos voluntarios, y viendo lo bien que fue todo nos comprometimos a repetirla el año siguiente. Por causas ajenas a nuestra voluntad no pudo ser, pero este año estuvimos bien atentas para fijar fecha y en plan guerrillero salvo que causas más graves lo impidieran.El día escogido fue el pasado 24 de marzo y gracias a Dios acertamos. ¿Quién organizaría este evento? Este año ha sido el grupo de cocina de los miércoles en colaboración con unos voluntarios incondicionales que tenemos en El Rocío.
Se pone en marcha la máquina de la ilusión y nos distribuimos el trabajo. Los de Sevilla nos vamos a ocupar de arrendar un buen autobús con plataforma para subir y bajar los carritos, en total 56 plazas, más los aperitivos que fueron estupendos y muy variados.
Los de El Rocío tenían más tarea. Consiguieron que el Ayuntamiento de Almonte nos dejara gratis su casa que tienen para la Romería, pero eso si, tenían que limpiarla. No importa, la limpiaron con todo el cariño y quedó estupenda.
El almuerzo consistía en una paella (con todos sus avíos, como decimos en Andalucía) para 50 comensales, y también lo consiguieron gratis del mejor restaurante que hay en El Rocío. Las bebidas las puso otro amigo a un precio simbólico y el postre, que consistía en fresas, arándanos, naranjas y frambuesas ecológicas, lo regaló otra entidad conocida por nuestros amigos. Todo esto, más gazpacho que hizo un voluntario, más 300 croquetas que trajo otra del grupo. Aquello fue un derroche de generosidad y cariño. ¡Olé, por un trabajo tan bien hecho!
He empezado a hablar por lo secundario para que, conociéndonos tan limitados y pequeños, veáis como se ha volcado con nosotros La Providencia, protagonista principal junto con los acogidos de Regina Mundi.
Comienza la excursión a las 10:30h de la mañana con la llegada del autobús. Los voluntarios y voluntarias y nuestros amigos de Regina contentos y algo nerviosos por la novedad del día. A las 11:00h estábamos dispuestos para partir y atentos para no desperdiciar ni un minuto de nuestro tiempo, que iríamos transformando en felicidad y alegría. La Hermana Mª Ángeles rezó para que El Señor y La Virgen del Rocío nos acompañaran en todo momento.
Ya más relajados comenzamos a disfrutar del viaje, que duraría aproximadamente una hora y cuarto. Hay que aprovechar el tiempo, y como a un guitarrista profesional a bordo, nos disponemos a ensayar unas sevillanas que ha compuesto una voluntaria para este evento con la música de la famosa «No te vayas todavía». La letra es preciosa pero los cantores regulares, menos mal que viene con nosotros uno de los voluntarios más antiguos de Regina, Paco Cruz, que suple con su buena voz lo que nosotros no hacemos bien.
Se pasa el tiempo volando y… ¡ya estamos en El Rocío! En el lugar acordado nos reunimos con nuestros amigos voluntarios rocieros. Saludos, emoción y sin bajarnos del autobús les seguimos a que nos lleven a nuestro primer destino.
Nos adentramos ya en el Parque de Doñana, camino al Palacio del Acebrón. El entorno del palacio es muy bonito, pero ha empezado a llover y algunos acogidos prefieren quedarse en el autobús. La mayoría bajamos y como hay ascensor visitamos todo el recinto, donde se puede ver cómo vivían los habitantes de otros siglos, sus costumbres, sus viviendas, los aperos de labranza tan rudimentarios, y cómo habían ido evolucionando hasta nuestros días. Muy interesante. El palacio es moderno, de 1964, pero hecho con mucho gusto y en un sitio ideal.
Volvemos a El Rocío a la casa que nos ha cedido el Ayuntamiento de Almonte. Allí está todo el grupo de voluntarios que nos esperaban con tanto cariño a ayudar a bajar los carritos. Ya están preparadas las mesas como para una boda, todo un primor de detalles. Vamos acomodándonos acogidos y voluntarios, junto con las hermanas Mª Ángeles, Ana y Elisa.
El grupo rociero era quien servía, atentos a lo que cada uno necesitaba tanto de refrescos, cerveza sin alcohol o platos que había que reponer, pues la verdad es que llevábamos apetito y dimos buena cuenta del jamón, las croquetas, el queso, etc., todo en un ambiente alegre y feliz.
Cesó la lluvia y salió el sol, un detalle más de La Providencia que quería que no nos faltase de nada. Yo a esto le llamo besos, caricias, abrazos invisibles envueltos de ternura maternal.
¡Un aplauso! Acaban de traer la paella. ¡Qué tamaño y qué aspecto tiene Dios mío! Fueron enseñándola mesa por mesa como una obra de arte ante nuestros atónitos ojos y avivando el deseo de degustarla cuanto antes. Se mereció por lo buena que estaba un sobresaliente Cum Laude.
No menos exquisito fue el postre. Fresas escogidas en su punto con una vista y sabor inigualables, frambuesas y arándanos de esta bendita tierra regada por el rocío ecológico, que nos hace exclamar: ¡Gracias Señor por tanta delicadeza como tienes con nosotros!
Bueno, ya está bien de comer; vamos a pasar al concierto de guitarra por fandangos de Huelva. Hacemos un corro y Paco Cruz y el guitarrista se preparan para actuar. Suena la guitarra y con el canto y la gracia de Paco el ambiente se va caldeando. Un fandanguillo tras otro, aplausos. ¡Olé! ¡Qué bien se está aquí! Los voluntarios que nos habían estado sirviendo las mesas aprovechan este rato para comer. El tiempo pasa demasiado deprisa y tenemos que terminar cantando las sevillanas del adiós con nuestra letra propia, inventada por una voluntaria que finalmente no pudo venir. La repetimos por dos veces para empaparnos de su contenido. Merecía la pena.
Termina esta segunda fase de nuestra excursión y nos vamos a la Ermita a ver a la Blanca Paloma. Al llegar allí colocamos todos los carritos junto al prebisterio. Arriba, nuestra Madre del Rocío sonriendo dándonos la bienvenida. En su nombre salió un sacerdote (previamente avisado por nuestros amigos rocieros) a saludarnos y decir unas palabritas, y luego cantamos el Ave María de Lourdes con una letra hecha por una voluntaria, refiriéndose al momento que estábamos viviendo. Emoción, lágrimas… pero poco tiempo poco tiempo para estar con Ella, pues comenzaba una ceremonia de bautizos. En la puerta nos esperaba el autobús, preparado para el último periplo de nuestro día. ¿Dónde vamos ahora?
Volvemos a adentrarnos en el Parque de Doñana, a casa de una voluntaria que vive allí. Es un sitio precioso donde hay una casa de campo grande, donde se alojan las «visitas VIP» que van por allí por algún motivo; por ejemplo, ministros, consejero de la Junta de Andalucía, periodistas, etc. Hoy los personajes VIP somos nosotros.
Vamos a disfrutar de una pradera rodeada de árboles grandes que se mecen con la brisa, y un porche enorme donde hay plantas decorativas muy bonitas que, junto con unas mesas y sillones de jardín, nos acogerán para merendar en familia. Para que disfrute Miguel Ángel (el benjamín de los cogidos), nuestra amiga que vive aquí nos ha traído un corderito casi bebé, precioso, que se deja acariciar y juguetea con el niño. También ha soltado a las gallinas y a un hermoso gallo para que todos gocemos de este clima tan sencillo y acogedor.
La merienda comienza preguntando qué le apetece a cada uno. Café, zumos, té, leche, y para comer torrijas (que se acerca la Semana Santa), tortas de Castilleja, galletas… Hay para todos los gustos.
Estos hermanos de El Rocío se han volcado con todo y con todos, la verdad es que no se puede pedir más. Pero antes de embarcar de nuevo en el autobús, nuestro querido Andrés dijo unas palabras de agradecimiento por los mil detalles que habíamos recibido de todos. Aplausos para este campeón del Betis.
No faltó la foto familiar de despedida con la que más tarde la Hermana Mª Ángeles dió las gracias a todas las personas desconocidas que, fiándose de lo que le habían contado los voluntarios, habían hecho posible este inolvidable día.
Decir adiós a los que allí se quedan es triste, por eso nosotros decimos: ¡Hasta pronto, y que Dios os bendiga!
Cuando llegamos felizmente a Regina Mundi nos esperaba una docena de jóvenes para ayudar a los baños antes de acostarse. Aquí está Dios y su Divina Providencia. Gracias por todo Señor.
Sevilla, Marzo de 2012.
Carmen Torres.